¿Qué material se utiliza para los tubos criogénicos?

Las opciones de materiales para los tubos criogénicos varían en función de factores como el intervalo de temperatura deseado, la presión de funcionamiento, el entorno operativo y el coste económico. Éstos son algunos de los materiales habituales de las tuberías criogénicas:

Acero de alta resistencia a bajas temperaturas

Este acero utiliza carbono y manganeso como materiales principales, y añade pequeñas cantidades de níquel y cromo para mejorar la tenacidad a baja temperatura del acero. Al mismo tiempo, añadiendo una pequeña cantidad de molibdeno y vanadio, se puede mejorar la resistencia del acero. Este material tiene una gran solidez y resistencia a altas temperaturas, y es adecuado para diversos depósitos esféricos de ingeniería y recipientes a presión criogénicos.

Acero calmante de aluminio de bajo contenido en carbono

Este acero utiliza silicio y manganeso como componentes principales, añadiendo una cantidad adecuada de aluminio y granos finos, lo que puede mejorar la tenacidad del acero y mejorar el comportamiento ante el envejecimiento.

Acero inoxidable austenítico

El acero inoxidable austenítico tiene una estructura reticular cúbica cara-centrada estable y una buena tenacidad al impacto a baja temperatura. Su temperatura de funcionamiento puede ser inferior o igual a -196°C, lo que resulta especialmente adecuado para el almacenamiento y transporte de gas natural licuado, gas natural y equipos criogénicos de nitrógeno líquido.

Acero de baja temperatura a base de níquel

El níquel es el elemento principal de este acero, y a medida que aumente el contenido de níquel, también mejorará la tenacidad a baja temperatura del acero. Este acero puede utilizarse en equipos criogénicos de -40°C a -196°C.


Además, el polietileno, las aleaciones de aluminio y determinados aceros inoxidables (por ejemplo, 06Cr19Ni10) también se utilizan habitualmente en la fabricación de tuberías criogénicas. Estos materiales tienen una buena tenacidad al impacto y propiedades mecánicas a baja temperatura, y son adecuados para la fabricación de tuberías, válvulas, tanques de almacenamiento, etc. en entornos de baja temperatura.

A la hora de seleccionar materiales para tuberías de baja temperatura, es necesario considerar de forma exhaustiva la tenacidad a baja temperatura, la resistencia, la resistencia a la corrosión, la procesabilidad y el coste del material. Al mismo tiempo, deben respetarse las normas y especificaciones pertinentes para garantizar la seguridad y fiabilidad de las tuberías.